Los mejores discos de los 90 según RS

O según sus lectores, porque Rolling Stone les ha pedido que voten por los mejores discos de los 90 y acaban de publicar los resultados. Hay que decir que se trata de RS USA, ya que si fuera la versión spanish suponemos que el primero sería de Héroes, el segundo de Silencio y el tercero de Bunbury. Reducir 10 años a 10 discos hace que te dejes a mucha gente fuera, como a los Boyz II Men. Los Smashing Pumpkins son los únicos que tienen 2 discos entre la selección, y lo demás tiene pocas sorpresas. O sí. U2 en el cuarto puesto nos parece muy arriba, pero ya sabéis, el pueblo bebe soberano.

10. Guns & Roses – Use Your Illusion 1 and 2

9. The Smashing Pumpkins – Mellon Collie & The Infinite Sadness

8. Jeff Buckley – Grace

7. Metallica – Metallica (Black Album)

6. The Smashing Pumpkins – Siamese Dream

5. Oasis – (What´s The Story) Morning Glory?

4. U2 – Achtung Baby

3. Pearl Jam – Ten

2. Radiohead – Ok Computer

1. Nirvana – Nevermind

Diez cosas que debes saber antes de montar una banda de rock

David Bowie, que en sus ratos libres es Duff McKagan

Hoy en el blog tenemos de invitado a Duff McKagan, ex-bajista de Guns N’ Roses, que después toco en grupos más exitosos como Velvet Revolver y Loaded. En realidad lo ha escrito en su blog pero nos ha pedido que se lo publiquemos en New Musical Estréss para darle difusión internacional.

«Diez cosas que me hubiera gustado saber cuando empecé en una banda»

1. Si eres uno de esos que se mete en la música por tías y drogas y no porque te pierde una canción o por memorables momentos musicales, mejor te vas a casa.

Gilipollas.

2. No fumes crack en un jet privado alquilado.

¡El olor se mete en TODAS partes!

3. Procura que te guste la gente de tu banda.

O al menos utiliza el rencor reinante como trampolín para crear algo muy bueno.

4. Hay que tener un nombre de puta madre.

Al menos que tu banda sea tan buena que el nombre pase a un segundo plano, elige un nombre que signifique algo para el grupo y refleje de alguna manera la música que hacéis. Las cosas como son, Muse es un nombre algo lamentable. Pero una vez que ves o escuchas a la banda el nombre es lo último en lo que piensas.

5. No firmes un contrato que te ate de pies y manos con un manager.

No hay nada positivo para el artista en hacerlo. Si un manager cree en tí y puede conseguirte buenas giras y buenos contratos editoriales, etc. vale, entonces dale al manager su comisión por eso. Confiad en mí. No firmar nada mantiene a un manager buscándose la vida PARA el artista.

6. No te hagas adicto.

Las drogas y el alcohol pueden parecer atractivas y divertidas–un rato… hasta que no puedes vivir sin ellas. Entonces todo es absurdo y da mucho miedo.

7. Atento a cómo funciona el negocio alrededor de tu banda.

Pregunta constantemente y que nunca te de vergüenza hacerlo. «Cuánto cuesta hacer esta camiseta» o «para qué vale realmente una editorial» son sólo un par de ejemplos.

8. Intenta dejar claro desde el principio cuáles son tus ambiciones con la banda y cuáles las de tus compañeros de grupo, desde el principio.

Cuando empezamos con Guns N’ Roses, había un guitarra principal y un batería distintos. Cuando Axl, Izzy y yo cerramos una gira a lo punk rock por la costa oeste, en 1985, y los otros dos no quisieron dejar las comodidades de L.A., fuimos a buscar a otros dos que sí querían. Casual y afortunadamente, encontramos a Slash y a Steven Adler.

9. Acostúmbrate a estar alejado de la seguridad y el confort del hogar.

Llévate a tu oso de peluche si lo necesitas. Y el Skype.

10. No te portes como un gilipollas con otras bandas.

Si eres bueno y consigues mantenerte por un tiempo, el período de ser un gilipollas te va a hacer las cosas muy difíciles a la larga.»

Con las manos en la grasa

Pasta con chorizo

En un nuevo intento de aunar nuestras pasiones, aquí inauguramos una nueva sección, esta vez de cocina. No porque nos guste cocinar sino porque nos gusta comer. Estamos dispuestos a luchar contra la tiranía impuesta por las pijadas culinarias y la hipocresía de los programas de televisión patrocinados por hornos pirolíticos, que suena a rechupete o piruleta. Queremos reivindicar la verdadera cocina con la que nos hemos críado y que se manifiesta de forma innata a medida que crecemos, como animales que somos. En esta sección las únicas reducciones que veréis serán las de cráneos, y nuestra especia preferida será la nocilla. Hoy nos aferramos a un clásico,  la pasta con chorizo, claro, que provoca más adicción que la heroína.

Guns N' Roses, visionarios hasta en el fogón

Ingredientes:

Tacos de chorizo Revilla, el más auténtico. En su defecto, lanchas de chorizo revilla, al gusto, partidas en cachos pequeños. Los grumetes también pueden usar chorizo del picante.

Pasta. Da igual cuál. Macarrones de los pequeños, pajaritas, espaguetis, caracoles, rulos… nuestro conocimiento de las variedades de pasta es, como veis, sorprendente.

8 latas de cerveza

– La mitad de un ajo. ¿Un ajo es todo el ajo o una cabeza de ajo? Esperamos que lo sepas, si no igual te pasas o no llegas.

Tomate frito. Ni natural, ni triturado. Tomate frito de brick. Mejor si es Apis. Admisible Hacendado y Orlando. No admisible el tomate del Lidl. En serio. Es de demasiada calidad para nuestro plato.

– Una cuchara de aceite (conocido popularmente como un-poquito-de-aceite). Si no encontráis una cuchara de aceite también puede servir una cuchara de metal.

Queso rallado. El de 4 quesos de El Caserío para gratinar queda muy bien. Pero vamos, no es imprescindible como el chorizo o el ajo. O la pasta. No.

¿Y ahora qué?

Hervimos la pasta. Mejor si nos pasamos del tiempo de cocción, en plan madre. La separamos. Abrimos una cerveza.

Partimos el ajo en trozos pequeños. Nos olemos los dedos. En una sartén echamos un poco de aceite. Encendemos el gas o la vitro (nadie dice vitrocerámica a estas alturas de nivel lingüístico) con objeto de que se caliente el aceite, algo que nos va a ayudar a acabar mucho antes. Metemos dos dedos para comprobar si el aceite está lo suficientemente caliente.

Freímos el ajo. Cuando empiece a dorarse =cuando empiece a ponerse marrón, echamos el chorizo y procedemos a realizar uno de los actos básicos de la cocina española: rehogamos. Que es freírlo en una sartén, básicamente. Abre otra cerveza.

Lo juntamos con la pasta en una misma olla, también al fuego, o en la sartén si sólo haces comida para tí y el perro. Venga, de un trago.

Echamos el tomate y lo mezclamos con una cuchara de palo, porque las de aluminio rallan lo antiadherente de las ollas y las sartenes. Y las de aluminio con mango de plástico son una mierda, se rompen al mes. Como lo oyes. Bebe cerveza.

Mezclamos también el queso. Si es queso rallado, pues no, porque te da un poco igual echarlo antes o después. Si es del de El Caserío para gratinar, se deshace con el calor y se te saltan las lágrimas, ni en el mejor restaurante de París vas a probar una obra de arte semejante. Y mojad bien el pan y las falangetas.

Precio para 4 personas:  si cobras a tus invitados te saldrá la jugada perfecta, pídele 2 € a cada uno y obtendrás beneficios.

Tiempo de preparación: necesitas estar 30 minutos antes estirando brazos y bebiendo cervezas para estar un poco puesto.

Dificultad: Relativamente fácil.

Tócala otra vez, Axl

Guns N Roses revisited, que dan mucho juego, han vuelto a liarla. Esta vez ha sido en Reading y en Leeds, los festivales más importantes de todo Gran Bretaña y parte del extranjero.  Figuraban como cabezas de cartel el 27 y 29 de agosto, respectivamente, y se presentaron una hora tarde a tocar en Reading, donde les cortaron la luz antes de terminar el concierto. Como poligoneros chungos que son, amenazaron con no subirse al escenario en Leeds dos días después. Y no les quedó otra al final que actuar el domingo, eso sí, media hora tarde, así que les volvieron a cortar la luz. Esto debe ser una señal de su declive, porque ser una rock star y que un tío con un palillo en la boca te baje el diferencial de la luz a las 12 en punto debe ser muy triste. Quizás si no se hubiese cambiado de ropa diez veces podrían haber terminado a su hora.

Que les hiciesen cumplir el horario, como al resto de grupos del festival, le sentó regular a Axl y declaró la guerra a los promotores. El problema, Axl, es que ya no estamos en los ochenta, ni mucho menos en los noventa y ya no puedes seguir tirando televisores por las ventanas de los hoteles. Como sus ingresos ya no se lo permiten pero sigue siendo un rebelde, mr. Rose se pasó toda la noche lanzando huitos de aceituna desde la ventana de su habitación.

En un subidón de adenalina u otras muchas cosas que acaben en -ina, la banda ha asegurado que se va a encargar de que le devuelvan el dinero al público, idea que ha gustado mucho a los que pagaron la entrada, a los que no la pagaron y estaban dentro y sobre todo a los que pagaron por ver al resto de grupos y se fueron al empezar Guns N Roses.

De todas formas, queremos que se tome conciencia de que el problema de Axl es que lleva años llegando tarde a todo: a los ensayos, al estilista, a terminar un disco, a las listas de ventas y a su vida en general. Lo que tendría que hacer es venir a tocar a los festivales españoles, que al menos le pagarían un caché ridículamente desproporcionado, como a muchos de sus compatriotas. Y que se traiga la camiseta de Kill Your Idols y el pañuelo.